Aprendí que de la crítica perversa y manipulativa, no se aprende nada, al igual que de la culpa infeliz; acá es donde DEBO carretear más todavía para que mi vuelo pueda alzarse más alto aún; esto es rotundamente fatal!
En resumen, entre el DEBE y el HABER, aprendí que las RATAS no resisten las grandes alturas…
Ojalà nunca me falte ese coraje que a veces no sé de dónde catzo me sale, y aunque la rodilla se me disloque, quedando cual “CUASIMODO”, pueda como sea colgármela del hombro y seguir dándole a la carrera hasta que mi cabeza esté en las nubes, pero con mis pies bien adheridos a la tierra, porque si algo también aprendí, es que nunca falta algún tujes pa’ revolearle un buen patadòn más temprano que tarde!
Porque a pesar de que me cuesta verme en perspectiva, sólo así aprendí que observando desde las alturas existen personas para las cuales soy importante y, casi en la misma proporción, aprendí a observar lo grandioso que es el cielo que me cubre, percibiendo también mi pequeñez ante el Universo…
P.D.: Aunque éste añete las cuentas no me cerraron, más allá de mis sueños; con la conciencia tranquila sé que NADA DEBO, todo lo que soy lo entrego y saberse mìnimamente en paz con el alma NO tiene precio…
En GRAN parte los cimientos de algunas certezas, los tendré que refundar para poder meter en el volquete del 2008 muchos de mis pánicos, justamente aquellos miedos que me enseñaron que no me servían para NADA!
Ponièndole garra y voluntad, todos los comienzos pueden tener un mejor color...